Aumentó el consumo de cannabis, cocaína y metanfetaminas, a la vez que se incrementan las mezclas de peor calidad. Insisten en la necesidad de "replantear objetivos y actividades" para impulsar la "reducción de daños" por el uso de drogas.
Por Carlota Ciudad
Europa ha recuperado los niveles de consumo de drogas previos a la pandemia con más oferta -casi una droga nueva en el mercado por semana- y un mercado cambiante marcado por el contexto internacional, según un informe de expertos presentado en Lisboa.
“Nunca habíamos tenido una disponibilidad tan alta”, alertó este martes el director del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA por sus siglas en inglés), Alexis Goosdeel, durante la presentación del informe anual de la institución.
Añadió que “todo puede utilizarse como droga”, por lo que aumentan las mezclas de peor calidad, y “todas las personas pueden verse afectadas por estos cambios”, especialmente cuando Europa es un centro de producción de drogas “como nunca antes”.
En estos años aumentó el consumo de drogas, como cannabis (la sustancia más consumida – 22 millones de adultos europeos declararon haber hecho uso de ella en el último año-), cocaína y metanfetaminas.
Por ejemplo, en 2020, los Estados miembros de la UE notificaron 64.000 incautaciones de cocaína, un valor récord con un total de 213 toneladas (202 toneladas en 2019), lo que junto a otros indicadores sugiere que “no hay signos de que la tendencia al alza en la disponibilidad de esta droga, observada en los últimos años, haya cambiado”.
Bélgica -con 70 toneladas-, Países Bajos (49 toneladas) y España (37) representaron casi el 75 % de la cantidad total incautada.
Ese mismo año, se desmantelaron unos 350 laboratorios y se detectó una mayor diversificación en la producción, con más instalaciones de elaboración a media y gran escala.
Además, a finales de 2021, el Observatorio vigilaba unas 880 nuevas sustancias psicoactivas, 52 de las cuales se notificaron por primera vez en el continente.
Ante este fenómeno, la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, subrayó que estas nuevas sustancias y un aumento de su consumo “nunca vienen solos, sino que traen consigo problemas de salud mental, pobreza, aumento de los delitos y crímenes y aumenta el sufrimiento entre personas vulnerables”.
Por ello, defendió políticas sociales de la mano de medidas de seguridad.
El nivel de narcotráfico, uno de los negocios “más rentables”, agregó, muestra que las instituciones deben “hacer mucho más”, mediante el control del mercado de las drogas, las transacciones y la venta por Internet.
La situación internacional modifica el consumo y las rutas
La situación internacional influye también en el consumo, como la instauración del régimen talibán en Afganistán, que ha permitido un mayor acceso a metanfetaminas en Europa, “un nuevo peligro potencial” y que podría aumentar con los años, lo que sería “una terrible noticia”.
El conflicto que Ucrania y Rusia arrastran desde hace casi 10 años es otro fenómeno que ha influido en la lucha contra el consumo, ya que las fronteras poco definidas han permitido el tráfico “no solo de drogas”, explicó Goosdeel.
La invasión rusa de este año ha alterado también las rutas en el Mar Negro, que ahora se han trasladado a Rumanía, Turquía o Bulgaria, entre otros países.
“Basados en los informes preliminares de los que disponemos, estas rutas cambiarán. Ya han empezado a cambiar”, confirmó el director del Observatorio.
Combatir el consumo
Y para combatir el consumo de las drogas es necesario aplicar las medidas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), una pauta que no todos siguen, alerta el informe.
Solo cuatro países de cerca de una treintena notificaron el cumplimiento de los objetivos de la OMS para 2020 de proporcionar 200 jeringuillas al año por persona que se inyecta drogas y tener al 40 % de los consumidores de opioides de alto riesgo en tratamiento sustitutivo.
Esos países fueron República Checa, España, Luxemburgo y Noruega, un número “muy alarmante” en la lucha contra el consumo de opioides, a criterio de Goosdeel.
España registra un aumento del “Chemex”
España gana peso como proveedor de cannabis para la UE y registra un aumento del consumo de metanfetaminas asociado al llamado “Chemex” (sexo químico) en algunas zonas, según el informe.
Las restricciones provocadas por la pandemia se tradujeron en cambios en el mercado y estos se reflejaron en países como España.
“Los informes sobre el aumento de las grandes incautaciones de hierba procedentes de España indican que este país puede estar convirtiéndose en un proveedor más importante para el mercado dela UE”, señala el documento. La situación ha cambiado mucho y no solo por la covid, afirmó Goosdeel: “Hace cinco años, España era la puerta de entrada de la cocaína en Europa. Ahora es Amberes o Rotterdam”.
Sobre el sexo químico, recordó que “todo el mundo se puede ver afectado por el aumento de la disponibilidad de la droga”, “incluso personas que no son el objetivo de las intervenciones de prevención clásicas”, por lo que existe la necesidad de “replantear objetivos y actividades” para impulsar la “reducción de daños” por el uso de drogas.
EFE.